Quizás exorcismo, quizás ejercicio de reflexión. De cualquier manera, no son más que palabras que se unen en un lúdico baile (sin pretensiones ni egolatrías).
sábado, 26 de febrero de 2011
La sacudida de la Patria
Mañana es 27 de Febrero. Otra vez. La historia se repite. No importa el número de la conmemoración, que es el 167, el Día de la Independencia Nacional vuelve a encontrarnos sumidos en un mundo de dudas.
Parecería como si viviéramos en un afán permanente de buscar motivos para estar mal. Nunca llegamos al día de hoy con la sensación de que todo está en orden. ¿Será que nos gusta vivir con deudas?
Si pasamos balance a lo que hipoteca nuestra independencia veremos que tenemos demasiado por hacer. Todos tenemos marras invisibles y, aunque a veces no lo aceptemos, ellas nos obligan a permanecer anclados.
Si en términos personales nos sucede esto, como país no puede ser de otra manera. De lo económico a lo social, son muchas las cosas que nos atan y no nos permiten gritar al viento que somos independientes y vivimos en libertad.
Sobre algunas de ellas, asumo y espero, hablará el presidente Leonel Fernández en su discurso de hoy. Otras quedarán en el olvido, como siempre, porque a nivel gubernamental en la República Dominicana nunca hemos sido capaces de hacer la tarea a tiempo.
Hoy, sin embargo, no voy a hablar de eso que toca hacer a quienes nos dirigen. Este es un buen momento para pensar en cómo cada uno de nosotros puede rendir su propio tributo a la Patria.
Ha llegado el momento de sacudirse. No podemos seguir dejándonos vencer por la desidia. Hagamos algo para salir de esta inercia que nos domina como ciudadanos: si cada uno de nosotros hace algo por mejorar la nación, es seguiro que avanzaremos. Esa será nuestra mejor manera de celebrar la independencia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario